viernes, 7 de octubre de 2011

Parece que estemos viviendo
en el fin del mundo.
Los acontecimientos escenifican
un derrumbe paulatino,
lento e inexorable,
de las cosas.

La sensación, sí señor,
es de que el mundo se acaba
y poco podemos hacer
para remediarlo.

La crisis económica
sólo es uno de sus síntomas.

El declive empezó
mucho antes; como
un cáncer no detectado
a tiempo.

Parece que sea
ya demasiado tarde.


3 comentarios:

  1. El ser humano tiende siempre a dejarse llevar. Al catastrofismo. Yo no pienso que todo se esté viniendo abajo, que el mundo se esté acabando y todo eso. Para nada. Pienso que, simplemente, las cosas necesitan cambiar. El proceso de mutación es tan viejo como el mundo y se da continuamente. Cambiará el sistema, el estado, la forma de vida incluso. Pero el mundo seguirá. Para el ser humano nada es demasiado tarde. Sencillamente, todo lo trascendental queda fuera de su órbita.

    ResponderEliminar
  2. hombre, siendo sensato, estoy totalmente de acuerdo contigo; lo que ocurre es que a veces me da gusto aparcar la sensatez (tal vez demasiadas veces);

    un saludo y gracias por el comentario

    ResponderEliminar
  3. Apocalipticos e integrados, que cada vez son menos y viven mejor.

    ResponderEliminar

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.