sábado, 16 de abril de 2022

Móviles y mascarillas

En China se están produciendo restricciones salvajes. Los chinos están matando los animales de compañía de las personas infectadas, cuando en el resto del mundo se anuncia el final de la pandemia. Qué saben los chinos que los demás no saben. De momento, mientras esperamos el anuncio del fin total del uso de mascarillas en espacios públicos, viajamos en avión ataviados con estas prendas deliciosas azul celeste. Tres horas junto a decenas de personas en una situación que hace meses se consideraría un peligro para la salud colectiva. Qué ha cambiado. Qué habrá cambiado realmente. Tratamos de dormir y luego, algunos, ya despiertos, nos procuramos diversiones portátiles de diferente forma. A mi alrededor, dos chicas de poco más de veinte años se disponen a ver un capítulo de algún serial televisivo en la pantalla de un teléfono móvil. Dos filas más abajo, junto al pasillo, un tipo juega a un, para mí extraño, juego de rol en la pantalla de un teléfono móvil. Un adolescente junto a mí elige jugar a un videojuego en la pantalla de su teléfono móvil. Detrás de mí, un hombre viejo lee, como yo, un libro. Un libro de papel, con sus tapas de cartón, su perfecto diseño cuadrangular, sus letritas distribuidas por sus páginas sobre fondo blanco. Trato de averiguar el título, pero no lo consigo y no pretendo ser indiscreto. Siento un poderoso hermanamiento con ese viejo que lee. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.